La facilitación de las conversaciones por parte de Rusia ha disgustado enormemente a Washington, que desde hace tiempo recela de la participación rusa en Sudamérica.
Samantha Power ha sido una franca defensora de la intervención humanitaria de EE.UU., promoviendo la guerra de Irak y defendiendo a los violadores de los derechos humanos como Israel y Arabia Saudita.
Rick Sterling viajó a Venezuela a principios de diciembre como parte de un grupo de observadores electorales internacionales y dice que algunos en los medios de comunicación de EE.UU. han conseguido la historia seriamente equivocada.
Las nuevas sanciones llegan incluso cuando se estima que 100.000 personas han sido asesinadas por las sanciones estadounidenses sólo en Venezuela, ya que se ha bloqueado la entrada en el país de equipo médico vital y de medicamentos que salvan vidas.
No está claro por qué la embajada decidió volver y borrar su historial de publicaciones, especialmente porque socavar las elecciones de Venezuela sigue siendo la línea oficial del gobierno de EE.UU.
Después de cuatro años de sanciones, sabotaje de industrias, intentos de golpe de estado, un intento de asesinato con aviones no tripulados, una incursión mercenaria y ataques paramilitares, entre otros, Venezuela logró sobrevivir a la máxima presión de la administración Trump.
A pesar de que la elección fue supervisada por más de 4.500 observadores internacionales, las encuestas de EE.UU. y los expertos de los medios de comunicación la etiquetaron como una farsa antes de que se llevara a cabo.